¿Qué se puede…

Reciclaje del móvil

Podríamos pensar que tecnología y reciclaje son términos opuestos, sin embargo, y pese a que vivimos en una era aparentemente consumista y marcada por el egoísmo, lo cierto es que usar dispositivos tecnológicos no está reñido con preocuparse por el medioambiente y tener una actitud responsable. De hecho, cada vez somos más conscientes de que nos estamos cargando el ecosistema y que es urgente una solución al respecto que, al menos, minimice los daños. Por contra, no podemos resistirnos a adquirir el último modelo de teléfono móvil o a reemplazar nuestro dispositivo en cuanto notamos que va decayendo. ¿Cómo lo hacemos? En el reciclaje del móvil puede estar la respuesta. Súmate a reciclar tu móvil

Los materiales que componen un móvil, en su mayoría, pueden reciclarse. Esta es, sin duda, una excelente noticia, sobre todo, para que no nos sintamos tan culpables de comprarnos un teléfono móvil cada vez que cambiamos nuestro dispositivo. 

Desde el plástico, hasta el hierro y el cobre, son materiales que podemos llevar a reciclar, darle una nueva vida a tu teléfono que ya no usas es otra opción, llevándolo a donar a personas que lo necesitan o a comercios que lo reutilizan para diferentes fines. Vamos a conocer más sobre qué se puede reciclar de un teléfono móvil

Los teléfonos móviles también se reciclan, ¿lo sabías?

Reciclaje del móvil

Pues sí, los teléfonos móviles pueden reciclarse y, si no en su totalidad, sí al menos parte de los materiales que lo componen. Tal vez desde determinados sectores, sobre todo de personas preocupadas por el medioambiente y que culpan al progreso del mal estado de nuestro planeta, hemos demonizado un poco el uso de teléfonos. Pero la realidad es evidente y estamos enganchados a ellos. 

No debemos sentirnos mal, porque tener un teléfono móvil no es adquirir un artículo superfluo o meramente ocioso. Se ha convertido en una herramienta fundamental para el trabajo, para estudiar y para nuestra vida diaria. Además, los teléfonos móviles son actualmente instrumentos muy útiles para un sinfín de cosas cotidianas, incluyendo para el cuidado de nuestra salud. 

Saber dónde están y cómo se encuentran nuestros seres queridos, incluyendo a los más vulnerables como niños y nuestros mayores. Llevar un control de nuestro ritmo cardíaco, el número de pasos que damos o las calorías que quemamos cada día. También, analizar la calidad de nuestro descanso. Llevar nuestra agenda para que nada se nos olvide y la actividad de nuestros hijos en el cole, la guardería o entre el grupo de madres. ¿Qué haríamos nosotros sin el móvil? 

¿Qué podemos hacer para que nuestro progreso no destruya el planeta? Intentar alargar al máximo la vida útil de nuestros dispositivos, usar materiales que no resulten tan contaminantes y reciclar aquellos teléfonos que ya puedan volver a tener uso porque están muy deteriorados. Pero, ¿qué porcentaje de teléfonos se puede reciclar? Lamentablemente, un porcentaje muy inferior al que nos gustaría, pero al menos, pongamos toda nuestra voluntad para que aquel porcentaje posible, efectivamente, lleguen a buen término y no acabe en un vertedero esperando a que la basura nos termine invadiendo y enfermando.

Según las estadísticas, apenas un 15% de los móviles son reciclados actualmente. En nuestras manos está cambiar eso y aumentar esta cifra reduciendo su impacto medioambiental.

¿Qué partes de un teléfono móvil se pueden reciclar?

Entre las partes que se pueden reciclar de un teléfono móvil están:

  • Los procesadores: son reciclajes en un 80%.
  • Las pantallas también se reciclan, en su totalidad (100%). Igual que el plástico interior y exterior del dispositivo, los cargadores, el hierro y el cobre que lo componen. 
  • La cámara se puede reciclar al 90%.
  • En cuanto a la batería, esta se recicla solo el 50%. 

Preocupa precisamente la batería con especial inquietud, porque son altamente contaminantes. Suelen llevar iones de litio o polímeros y, en un año, se puede tirar unas 100.000 toneladas de baterías. ¡Imagínate!

¿Qué es lo más desolador? Pues que la mayoría de las veces que “jubilamos” un móvil o cualquier otro dispositivo que funciona con batería, porque hay muchos y no solo telefonía, lo hacemos porque la batería está fallando. 

¿Qué hacemos con nuestro viejo teléfono?

Reciclaje del móvil

Parece una obviedad que usar tecnología está resultando dañino para la naturaleza y, de rebote, para nuestra propia salud y supervivencia. Sin embargo, parece igual de claro que a estas alturas sería una hecatombe pedir al ser humano que renuncie a este progreso y aprenda a convivir sin teléfonos móviles, tablets u ordenadores. 

No está todo perdido todavía. Tal vez la ciencia y tecnología consigan avanzar en un futuro, ojalá no tan lejano, hasta encontrar formas de fabricar dispositivos con materiales menos contaminantes. Mientras tanto, podemos apostar por dar un uso alternativo a nuestros teléfonos antiguos y reciclar el móvil, llevarlo a un punto limpio o, si todavía funciona, donarlo para que tenga una segunda oportunidad. Es tiempo que vamos ganando. 

De este modo, si tienes un móvil que no utilizas en casa, te animamos a hacer lo siguiente:

  1. Donar el teléfono o incluso intentar venderlo como segunda mano. Esto último incluso puede darte unos ingresos, lo cual nunca está mal. En el peor de los casos y, si nadie te lo compra, al donarlo, estarás ayudando a personas que lo necesitan pero no cuentan con recursos para adquirir uno, a la vez que te libras de un trasto que está ocupando lugar en tus cajones.
  2. Llevar el móvil a un punto limpio, para que los profesionales sepan cómo tratarlo y reciclar el teléfono. Ya hemos visto que hay partes de un móvil que se pueden reciclar. 
  3. Mientras el dispositivo todavía funcione, aunque sea parcialmente, lo puedes aprovechar para usos alternativos como, por ejemplo, como cámara de fotos y como grabadora, o incluso para tenerlo escucha bebés.

Un consejo final es que, cuando quieras cambiar de teléfono, te asegures de elegir un buen móvil, para no arrepentirte posteriormente y querer sustituirlo por otro rápidamente.

¿Y tú qué vas a hacer a partir de ahora con tus viejos móviles? Se puede reciclar un teléfono móvil o parte de sus componentes y es la mejor manera, aparte de intentar alargar al máximo su vida útil, de cuidar el medioambiente disminuyendo la generación de residuos contaminantes. ¿Apostarás por el reciclaje del móvil?