La apuesta más ambiciosa de Mi-2S tiene que ver con la renovación de su procesador, bajo el respaldo de un fabricante como Qualcomm, y el soporte técnico que supone el modelo 600 de Snapdragon, con un procesador de cuatro núcleos de 1,7 GHz.
Por otro lado, no faltarán los accesorios complementarios, con una memoria interna de 16 GB para el almacenamiento, pantalla de 4,3 pulgadas, resolución de 1280 x 720 píxeles, batería de 2.000 mAh, y una cámara de 13 megapíxeles.
Pero la verdadera oferta y el punto de atracción más fuerte de Mi-2S tiene que ver con la cotización del smartphone (370 dólares), un precio muy asequible que sin duda alguna se perfilará como una de las tentativas más generosas en lo que va del año.
